SOL SEVERINO
El BUEY
SOL SEVERINO
Crecí en un contexto familiar complicado y desde mi tierna niñez tuve que separarme de mis padres, trabajando arduamente y soportando injusticias. Por ese motivo, renege del Eterno, estaba enfadada y no entendía porqué Él había permitido tanto sufrimiento. Viví mi vida, sin rumbo y de la manera que se iban dando las cosas.
Un día fui invitada a ir a un retiro y sentí la necesidad de ir, en ese retiro el Padre me habló y me dijo “Tú eres preciosa a mis ojos”. Él derramó en mí un amor y aceptación que jamás había experimentado.
He tenido que pasar un proceso de transformación, lidiar con miedos, inseguridades, afrontar retos, etc. Sin duda puedo decir que no soy quién era y hoy entiendo que todo lo que pasé es para ayudar a los demás. El Eterno me ha dicho que soy como un buey, tengo que trabajar el campo, ayudando a sembrar la buena semilla de sus Buenas Nuevas. Mi ministerio es de Evangelista y Pastoral, también opero con el don de servicio, hospitalidad y misericordia. Mi anhelo es abrir las puertas de los cielos para que todo necesitado y quebrantado de corazón, pueda venir y recibir el amor del Padre.
